La música desata
grandes sentimientos.. Cada canción produce uno diferente. ¡Cómo quisiéramos
estar en algún lugar, momento o fecha específica al oír esa tonadita! Recrear
el momento. Ya sea para cambiarlo o simplemente para volverlo a vivir de la
misma forma en la que sucedió.
Alguna vez un hombre
dijo “La vida sin música sería un error”. Personalmente, yo no sabría que sería
de mi sin la música.
Es el medio perfecto
para distraerme, informarme, transmitir, comunicarme, imaginar, bailar, soñar,
divertirme, cultivarme, intrigarme, sacar nuevas facetas e irme
descubriendo poco a poco.
Al oír algo que me
gusta, de inmediato me gusta saber quien es el intérprete, conocer su historia
(trasfondo) ya que es fundamental para conocer las razones de sus letras y
sorpresivamente la mayoría de las veces te dan a entender otro punto de vista
de las canciones asociándolas con su biografía.
Si me preguntas no sé
tocar ningún instrumento musical. Creo que podría ser un motivador para la
apreciación musical ya que te permitiría llegar más allá al ponerte en los
“zapatos” de los compositores. Sin embargo creo que el apreciar la música desde
fuera también es algo grandioso.
Algo que es básico para
un conocimiento más amplio del tema es informarte acerca de música a nivel
mundial y cubriendo todas las épocas, al menos las más determinantes para este
arte.
Nosotros sabemos que
“Ojerosa, flaca, fea, desgreñada. Torpe, tonta, lenta, necia, desquiciada,
completamente descontrolada” no es ningún insulto.
“Psycho Killer Qu'est-ce que c'est Fafa fafafafafafa” no es que te volviste loco, ni se
te trabó la lengua. Son los Talking Heads.
Y que a Lou Reed no le
salió un gallo desentonado en el momento de cantar Perfect Day “Its such a
perfect day. You just keep me hangin on” (8)… sino que fue a propósito porque
eso es lo que hace que suene súper cool.
En fin, es que hay
tantas cosas que muchos desconocen, que ni cómo arreglarlo!!!
Lo mejor que podemos
hacer nosotros es seguir disfrutando los secretos del mundo de la música.