lunes, 11 de marzo de 2019

IGUALA: LOS AÑOS DE 1970 EN ESCENA

Domingo de teatro, esto se está volviendo un ritual. El domingo pasado fui a ver El Coyul al Foro Locomotora y el día de ayer dediqué toda mi mañana a los museos ya que los fines de semana son gratuitos y hay mucho por conocer. Y a las 7 pm, literal decidí que iba a ir a la obra 1970 y la noche del porvenir que se presentó gratis a las 7 pm en el Teatro Juárez. La verdad no tenía muchas expectativas de la obra, sólo quería ir a ver algo nuevo y resultó que me gustó mucho más de lo que pensaba.

Esta a obra escrita por Roberto Vásquez de la compañía De La Mancha Teatro A.C. es narrada de una manera alternativa, no presenta el típico esquema de narrador ni una cronología lineal. Va dando saltos en el tiempo y tiene a tres mujeres como narradoras que están vestidas todas de negro y aparecen en diferentes puntos del escenario.
Tras darnos a entender un poco del contexto que se vivía en Iguala, Guerrero durante esa época y presentar a los personajes quienes eran trabajadores de las molinos cafeteros, empiezan a hablarnos de la represión que vivían los estudiantes en esa época. Y la poca tolerancia del gobierno ante el tema.
Luis Echeverría, presidente de esos tiempos no mostraba apoyo alguno en la materia educativa y las manifestaciones estaban a todo lo que da.

Como era de esperarse, el gobierno organizó una serie de matanzas en 1970. Un capítulo que ha quedado enterrado en la historia de Iguala. Se trata de la Guerra Sucia que ha sido censurada a través de tanto tiempo y que fue silenciada junto con las voces de los tantos estudiantes reprimidos y con ideas acalladas que nunca se escucharán.

En los tiempos de las Leyes de Reforma hubo varios impactos aquí en Oaxaca, tanto en la construcción del Templo de Santo Domingo, las Orquestas Filarmónicas como el Teatro Juárez, sede del espectáculo de la noche de ayer.

Los actores finalizaron la producción dirigida por Irving Marcelo Hinojoza repartiendo café de las fincas a algunos de los asistentes para darle un toque más real a la obra. Por cierto, a mí me tocó.

En lo personal la obra me transmitió lo esperado y me informó acerca de algo que no sabía. En cuanto a la manera en que la presentaron me gustó bastante, pues no es un esquema tradicional y es 100% independiente. Lleno de talento joven y mexicano. Apoyo a estas iniciativas que cuentan hechos de impacto político de una manera artística, musical y con contenido y simbolismos durante la hora y media que duró la presentación. Y Oaxaca está plagada de eso...

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